Un error de organización en la sede del Registro Civil de Madrid, en la calle Pradillo, ha mantenido durante días una serie de documentos e historiales importantes de muchos ciudadanos a 'disposición' de todo el mundo al estar situados en una sala de espera de las oficinas.
Según informa el diario Qué!, en un proceso de archivo de los historiales, los funcionarios colocaron expedientes y solicitudes en esta sala y allí han estado un par de semanas ofreciendo a todo el que la visite la posibilidad de consultar nombres, teléfonos o direcciones de muchos españoles.
La Agencia de Protección de Datos ha indicado que se puede abrir una investigación de oficio tras salir esta información y "se pueden exigir medidas correctoras, pedir la actuación del Defensor del Pueblo e incoar medidas disciplinarias".
La Consejería de Justicia de la Comunidad de Madrid subraya que es un caso particular que "se subsanará".
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